Si estás lidiando con deudas abrumadoras, es posible que tus acreedores hayan tomado medidas para recuperar el dinero que les debes. Una de las formas en que pueden hacerlo es a través de una orden de embargo salarial o “wage garnishment”, la cual les permite tomar una parte de tu salario para pagar tus deudas. Sin embargo, la bancarrota puede detener el proceso de embargo salarial y proporcionarte un respiro financiero.
Cuando declaras bancarrota, se produce algo conocido como “la suspensión automática”, la cual detiene temporalmente la mayoría de las acciones legales y de colección contra ti. Esto incluye una orden de embargo salarial.
Una vez que la suspensión automática entra en vigencia, tus acreedores ya no pueden tomar medidas legales para cobrar tus deudas, lo que significa que el proceso de embargo salarial se detendrá inmediatamente.
Es importante tener en cuenta que el embargo salarial no se detendrá permanentemente mediante la bancarrota. Si tienes deudas que son susceptibles de embargo salarial, es posible que tengas que lidiar con este problema nuevamente en el futuro.
Sin embargo, la bancarrota puede proporcionarte un respiro financiero temporal mientras trabajas para resolver tus problemas de deuda a largo plazo. En muchos casos, la bancarrota te permitirá liberar algunas o todas tus deudas no garantizadas, lo que puede liberarte de una carga financiera significativa.
Es importante tener en cuenta que no todas las deudas son liberables a través de la bancarrota, y los requisitos de elegibilidad varían según el tipo de bancarrota que presentes. Por ejemplo, el Capítulo 7 de bancarrota te permite liberar la mayoría de tus deudas no garantizadas, pero debes cumplir con ciertos requisitos de ingresos para ser elegible. El Capítulo 13 de bancarrota, por otro lado, te permite conservar tus bienes mientras pagas tus deudas a través de un plan de pago durante un periodo de tres a cinco años.
En general, la bancarrota puede ser una opción viable para aquellos que luchan con deudas abrumadoras y que necesitan una pausa en el proceso de embargo salarial. Sin embargo, es importante trabajar con un abogado de bancarrota experimentado para asegurarse de que entiendas los pros y contras de la bancarrota, y para ayudarte a determinar si es la mejor opción para tu situación financiera.
En conclusión, si estás lidiando con un embargo salarial, la bancarrota puede proporcionarte una solución temporal y detener el proceso de recolección mientras trabajas para resolver tus problemas de deuda a largo plazo. Si estás considerando la bancarrota, es importante que consultes con un abogado de bancarrota para asegurarte de que entiendas tus opciones y cómo la bancarrota podría afectarte a largo plazo.